Un sinnúmero de familias se movilizaron al Congreso de la Nación porque se ven perjudicadas con la toma de decisiones del gobierno Federal, que unificará algunos planes sociales y otros serán dados de baja. El valor percibido de 4700 pesos por cuatro horas de trabajo diario, se ve ensombrecido con estas propuestas, por ello los damnificados emprendieron una marcha multitudinaria en defensa de sus derechos laborales “precarios”, pero que sirven para paliar la pobreza extrema en la que se encuentran desde hace años.
El miedo a perder su única fuente de trabajo obligó a los manifestantes a realizar algunos piquetes y cortes de calles marchando bajo el sol con sus hijos, sin tener ni dinero, ni agua, no como creen muchos que van por plata o el choripan. Muchas personas, y más comúnmente, aquellos que tienen la suerte de tener un empleo en blanco con cobertura médica, difaman desde un escalón más alto, denominando a estas personas como planeros, me gustaría preguntarles, cuantos de ellos darían algo de su sueldo para mejorar la situación de pobreza en el país. Es muy probable que no contesten nada, porque cuanto más tienen, más quieren tener, y ellos son los mismos que les dan empleo en sus casas o campos teniéndolos en negro con salarios denigrantes, que no les permite crecer demasiado.
Por: Diana Godoy / Ausmendi María.
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